Vamos por el mismo cielo

domingo, 1 de mayo de 2011

4

25 minutos en 5.

Cada gota cae más despacio, cada segundo se va más rápido. Me doy cuenta que el tiempo se escurre de mis manos como arena, se pierde en el aire, se lo llevan las olas, la espuma y el sol.

Una hora se fue y en 8 minutos me di cuenta que ya no estaba, pienso y me demoro, pero rápido se va.

Las canciones son más cortas, vuelan sobre mí, siento su calor irse por encima de mi cabeza.

Dormiré, solo porque quizás 8 horas me den 25 minutos de recuerdo de un sueño, un sueño especial, fantástico, de colores o gris, al final no importará. Solo quiero soñar, despertar y esperar con ansias la noche que viene, para soñar una vez más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario