Tengo sueño sin sueños y pienso en lo que pienso, pero no sé qué es. A veces sueño, pero no tengo sueños, despierto y no tengo nada... Solo la oscuridad que me dice que aún es muy temprano para levantarse. Me dejo caer sobre mi cama otra vez, a ver si encuentro algo que valga la pena soñar.
Y a lo lejos me pareció encontrar algo.
Tan lejos que desperté antes de llegar.
Mis demonios suelen escapar por mis manos, para volver a mi cabeza cuando acabo de escribir. ¿No es así como debería ser?
Quizás nada debe ser como debería ser, todo debería ser diferente. Menos la música y el sueño, dormir no cambia nunca, siempre será un escape a la realidad, para otros será la realidad y mi realidad es... no sé.
Si pudiera elegir cómo morir... sería soñando, soñando algo sin sentido, algo irreal, fantástico y loco. Diferente.
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